En una empresa se necesita ganar potencial para saber tomar decisiones o influencia hacia los demás dentro de la empresa, bueno y porqué no fuera de ella. Esto ayuda a mejorar la posición de uno en otros, pero se debe seguir unas ciertas reglas a nivel profesional y comportamientos que se efectúan dentro del trabajo. Como por ejemplo la hora de llegar al trabajo, ser puntal, o cómo nos vestimos, pequeños puntos como estos nos ayudan a dar interactuar ante la empresa y hacia el cliente.
Son muy importantes y útiles, estas se pueden conseguir a través de una buena presentación ante un desconocido, o socio de la empresa, se debe adquirir un ambiente sano, cómodo y de disposición.
Existen personas que hacen que las cosas sucedan mientras existen otras que miran como suceden y otras que no saben, y se preguntan qué está sucediendo. Bueno pero ser una persona que haga que las cosas fluyan hacia las metas es una buena práctica positiva, nosotros tenemos el poder de la decisión y de poner adelante las metas y objetivos de uno mismo, y de la empresa.
Debemos ser de las personas que actúen y hagan mover el futuro hacia un lugar más próspero, ser personas que motivamos a los demás a seguir adelante a pesar de las circunstancias que nos rodean, debemos luchar por nuestros objetivos para así conseguirlos. No se debe ser deshonesto, ser desagradable no debemos mostrar actitudes negativas ante nuestros jefes, compañeros o clientes, se debe saber como manejar situaciones de conflicto, aprovechar las oportunidades que se nos muestran en el proceso para mantenernos como personas íntegras y que demuestre lo que decimos y lo que somos.
Ser una persona que se muestre positiva, genera atracción de los demás y eso es una oportunidad también para darles de nuestros valores y que también así, se contagien del positivismo y las actitudes que debemos mostrar. Debemos construir un ambiente que muestre satisfacción hacia los demás, siempre se deben evitar malos gestos que hasta podrían llegar a la expulsión de la empresa, por eso es mejor conservar la calma ante ciertas circunstancias, siempre fijándose al objetivo que esto nos hará mejores personas.
Para terminar se debe recalcar que nosotros hablamos con nuestros gestos, entonces debemos saber cómo dominar nuestro cuerpo para que las demás personas que nos rodeen se sientan agradables, esto hace que nuestras actitudes positivas se transfieran hacia los demás y seamos un líder inspirador. Y como último le queda una pregunta personal, ¿Las oportunidades llegan o se contruyen?
Bibliografía
Andrew J. DuBrin. (2008). Relaciones Humanas. Estado de México: Pearson Educación.
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